Gaceta de La Solana
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Reportaje
Simplemente salir y charlar es una buena terapia.
ticipar en un curso formativo de rango viudedad, la Asociación “Nuestra Señora
nacional titulado “El Voluntariado y su de Peñarroya” tiene repleto de propuestas
promoción día a día”. Se celebró del 22 al su cuaderno de bitácora. Están dispuestas
24 de noviembre pasado y los gastos de a a participar de lleno en la vida solanera.
alojamiento y manutención corrieron a Además de reunirse todos los jueves, de
cargo de la confederación. Tres días que 5 a 7 de la tarde, preparan conferencias y
ambas vivieron con enorme intensidad. han comenzado a gestionar cursos de dis-
“Aprendimos mucho y nos dimos cuenta tinto cariz. El director de la OMIC, Santia-
de la cantidad de cosas que podemos ha- go Gª Cervigón, la pedagoga Mª José San-
cer” –comenta Rosario-.
tos Milla o la psicóloga Marisol Morales,
Fueron unas jornadas bastante inten- ya han pasado por el nuevo auditorio que
sas, a la que acudieron representantes representan las afiliadas de la asociación,
de asociaciones de viudas de toda Espa- de momento 17 dadas de alta. La directiva
ña. Había gente de Cantabria, Mallorca, se está moviendo para conseguir un curso
Extremadura, Madrid o Valencia, que de informática básica.
asistieron a un total de siete conferencias,
Esta Navidad han organizado una
todas impartidas por ponentes de primer “operación kilo”. Todas las socias parti-
nivel. Sobre la mesa, asuntos de máximo ciparon en la entrega de alimentos para
interés. Por ejemplo, se habló del estado las familias más necesitadas, canalizada
actual de las pensiones de viudedad y or- a través de Cruz Roja.
fandad, compatibilidad pensión-trabajo,
testamentos, herencias; o sea, asuntos
que afectan directamente a una mujer
Fuera prejuicios
viuda y que muchas veces ignora cómo
La Asociación de Mujeres Viudas
resolverlos. “Queremos ser útiles para “Nuestra Señora de Peñarroya” llega
cualquier mujer que desee asesoramiento para quedarse. Sus directivas han de-
legal y no sepa qué hacer o a quién diri- jado atrás cualquier prejuicio. Nadie
girse” –insiste Encarna-.
les puede dar lecciones de cómo sufrir
Al margen de la atención a los proble- antes, durante y después de la dolorosa
mas legales derivados de una situación de muerte de su marido. Lo dieron todo
por ellos hasta que sus vidas se apaga-
ron, de modo que no temen dimes y di-
retes. Dicen que es posible que alguien
las tache de lo que no son. Es verdad,
imbéciles nunca faltan. El caso es que
ellas transportan su pena dentro de sí,
como la que más, pero han aprendido
que la vida es demasiado corta, y dema-
siado bella, como para quedarse clava-
das a mitad de camino.*
