Gaceta de La Solana
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también en blanco y negro por muchas
razones, pero donde la gente se afanaba
por divertirse cuando podía. Y una tarde
de toros en la feria era un buen pretexto
para, cuartilla de vino en la mano, subir
a la plaza y solazarse viendo torear a los
Roncho, Lorenzo Manuel Villalta, Pepe
Carbonell, Manuel Cantero y compañía.
Después del 96 llegarían las grandes fi-
guras: El Juli, El Cordobés, Finito, Rive-
ra Ordóñez, El Litri, Castella, Manzana-
res, El Cid y demás. Pero esas tardes de
corrida grande todavía no pertenecen al
sello de “antaño”. Seguramente más de
un lector de GACETA podrá identifi-
carse en alguna de estas fotos, o cono-
cerá a fulano o a mengano. Es historia
de La Solana.*