Gaceta de La Solana
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Cultura
A
urelio
M
aroto
S
e puede discutir si la pe-
lícula gusta más o gusta
menos, si la cata comen-
tada es atractiva (o no), si la
tapa gastronómica es mejora-
ble (o no). Por supuesto, tam-
bién se puede debatir sobre la
idoneidad de mejorar esto o
aquello. Faltaría más. Pero es
difícil, muy difícil, sostener
que el Festival de Cine y Vino
“Ciudad de La Solana” no tie-
ne tirón o carece de interés
entre los solaneros. Hablen
datos y callen canas.
El nivel de asistencia a las
diferentes actividades progra-
madas, aún con altos y bajos,
ha sido realmente alto. Los
datos oficiales facilitados por
la organización cifran la asis-
tencia global en más de 5.000
almas. Un movimiento de
gente notable en apenas diez
días para un municipio como
La Solana. Se trata de nú-
meros fidedignos, resultado
de contabilizar las entradas
vendidas y los tickets expe-
didos para las proyecciones
cinematográficas, las catas
comentadas y las tapas, más
una estimación muy cercana
a la realidad de asistencia a
la gala final y la presentación
Actividad
Espectadores
Proyecciones centros educativos
1.481
Largometrajes
255
Estrenos (Sinsajo y El Puente de los Espías
1.493
Cortometrajes (Sección Oficial
810
Gala de clausura
300
Catas de vino, queso y concursos vino
247
Presentación vinos jóvenes
200
Tickets ruta de tapas
220
Total asistencia
5.006
Fuente: Festival de Cine y Vino
Hablen números…
El XI Festival de Cine y Vino registra sus mejores números de asistencia y económicos.
Unas 5.000 personas arroparon el conjunto de actividades.
Un éxito también económico
D
esde el punto de vista económico, la organi-
zación del Festival de Cine y Vino ha cifrado
los ingresos por todos los conceptos en unos
21.000 euros, lo que significa un 16% más que el año
pasado. Sólo la recaudación en concepto de asisten-
cia de público a las proyecciones cinematográficas y a
las catas ha subido un 8% en relación a la edición de
2014. A la luz de estos datos, el festival es claramente
autosuficiente.
Mucho público en las proyecciones.
Todas las catas se llenaron.
de los vinos jóvenes, que fue
incluida como una actividad
más. De acuerdo con tales
guarismos, nos encontramos
ante la edición más participa-
tiva en la historia del festival
cinéfilo-vinatero.
Hay particularidades reseña-
bles. Por ejemplo, es la prime-
ra vez que los pases de cortos,
en su conjunto, han superado
a cada estreno. Han acudido
810 espectadores a la sección
oficial, por 754 y 739, respecti-
vamente, a los estrenos nacio-
nales de
Los Juegos del hambre
y
El puente de los espías.