GACETA DE LA SOLANA 301

Gaceta de La Solana 32 A urelio M aroto E s habitual, y hasta natural, que un impacto emocional disminuya su intensidad a medida que se hace repetitivo. Sí, nos hemos acostumbrado a que La Solana tenga campeones na- cionales y deportistas de élite en distin- tas especialidades. Lo asumimos como algo consuetudinario. Pero la portada de este número de GACETA exhibe un hito sin precedentes en el deporte local, que probablemente no tenga parangón en municipios de nuestro tamaño. En este artículo no –solo- vamos a contar- les cómo les fue a Paula Sevilla, Hermi Parra y Antonio Serrano en el Campeo- nato del Mundo de Atletismo recién celebrado en Budapest (Hungría); el objetivo es visualizar de nuevo que la ‘marca La Solana’ brilla más por ello. Y cada cual mide esa sensación de orgullo como le place. Desde luego, está hen- chida de ese orgullo. Antonio Serrano nos enseñó el cami- no. Era el alumno aventajado de aque- llos pioneros tantas veces mencionados: El Jardi, Amores, Lima, Poli, Fernando, Matute… Seúl-88 y Barcelona-92 son sus dos mayores mordiscos a un pal- marés gigante. Por ahí estaba ya el mar- chador Tomás Ruíz-Orejón, campeón de España cadete de marcha atlética y empezaba una campeona de vocación tardía: Mari Paz Naranjo. En los noven- ta, mientras Serrano acumulaba éxitos –entre ellos el récord de España de ma- ratón (2.09.10)- La Solana se convertía en sede de una de las mejores millas urbanas del país. Figuras como Martín Fiz, Antonio Páez, José Luis González o Maite Zúñiga regaron de glamour aquellas carreras en la calle Alhambra. Luego llegó el nuevo siglo, con aires renovados. Pedro Antonio Santos-Ol- mo (subcampeón de España de media maratón) o Pedro Juli Moreno (bronce nacional junior en los 1.500) brillaron como antesala a la llegada de Ignacio Díaz-Cano ‘Rechi’, otro campeonísimo nacional en categorías inferiores. Pero la gran paradoja vino con Pau- la Sevilla, Hermi Parra y Aroha Maeso, tres balas del tartán que revolucionaron lo establecido hasta el momento en La Solana. El fondo y el medio fondo que- daban relegados ante la pujanza de tres velocistas, y además mujeres. La criba más o menos lógica dejó a Paula y Her- mi como puntas de lanza. La primera es la recordwoman de 300 metros y llena su vitrina de éxitos en 100 y 200 metros. La segunda, con menos continuidad por culpa de las lesiones, también ha mordido medallas y es la vigente sub- campeona de España de 400 ml. La fuente sigue manando Lo que venga ahora es una incógnita, pero estamos seguros de que no deja- remos de relatar más éxitos de nuestro atletismo. El presente y el futuro pro- meten, si echamos un vistazo a las y los que ya despuntan en la cantera local. Hay madera para seguir exportando el nombre de La Solana, aunque depen- derá de muchos factores, claro está. Conviene ser prudentes, pero no cuesta nada soñar con presencia solanera en París-2024 –aparte de Antonio Serra- no-. Lo importante es que nuestro atle- tismo de base sigue siendo una fuente inagotable que no para de manar. Y no pregunten el porqué de tal milagro; na- die lo sabe a ciencia cierta. Un orgullo infinito La Solana brilla en el Mundial de Atletismo de Budapest Paula, Antonio y Hermi en el mundial de Budapest, a orillas del Danubio. Lo de Hungría ha sido la guinda al pastel –seguramente habrá más-. Pau- la Sevilla bordó su ‘curva mágica’ en el 4x100, pero fue insuficiente para entrar en la final. Hermi también cumplió, pero el equipo del 4x400 lo tenía casi imposible de antemano. Y como testigo, Antonio Serrano, que entrena a algunas de las mejores bazas de nuestro país y presume porque una es hija suya, Marta Serrano Azpiazu, que lleva sangre sola- nera. Por supuesto que sí. La Gaceta Deportiva