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Gaceta de La Solana

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Reportaje

Uno y otro también guardan con or-

gullo sus títulos de “Carnavalero”, otor-

gados por el Ayuntamiento. Paquillo

lo recibió en el año 1993 y Ré en 2013,

veinte años después. Pero no hay más

satisfacción que salir a la calle y disfru-

tar con la gente. “Nos gusta pasarlo bien

y que la gente se ría con nosotros”. Ré

lamenta que siempre haya alguna voz

discordante, “de vez en cuando oyes al-

gún comentario poco agradable, pero

nos da lo mismo”. Naturalmente, son

los menos. Necios hay en todos sitios.

Echan de menos aquel carnaval que

se paseaba por todo el pueblo. “Había

carnaval por cualquier barrio, con las

murgas cantando y la gente llamando

a las casas con su máscara diciendo ¿a

que no me conoces?”. En los años bue-

nos del desaparecido Cine Cervantes

había llenos constantes. “Se llenaba por

la mañana con el vermut, por la tarde

y en la sesión de noche” –recuerda Ré-,

que trabajaba allí hasta altas horas de

la madrugada y se escapaba a ratos con

su disfraz a cuestas. “Los martes por la

noche se juntaban todos los camareros

y Ramón Cañadas nos hacía una calde-

reta a la mañana siguiente. Así rematá-

bamos el carnaval”.

Sin embargo, huyen de nostalgias. Pa-

quillo echa de menos aquel carnaval,

aunque admite que ahora hay “mucho

más carnaval que antes”. La diferencia es

que se concentra en la plaza y alrededo-

res. Ha cambiado la manera, pero no la

esencia. “El carnaval de La Solana es muy

grande y lo importante es que se viva en

la calle”. Por cierto, quizás muchos no se-

pan que Paquillo también sale cada 24 de

diciembre vestido de Papá Noel, con un

saco lleno de caramelos a cuestas, que re-

parte entre los chiquillos, en el geriátrico,

o incluso en el hospital de Manzanares.

“Mi dinero me cuestan los caramelos,

pero no hay dinero que pague la sonrisa

de un niño, o de un anciano”.

Paquillo y Ré durarán lo que dicte

su salud. No tienen ganas de retirarse.

Ambos representan el aroma más au-

téntico de nuestro carnaval, como tan-

tos otros. GACETA se ha fijado en ellos

como ejemplo inequívoco. Pero este

reportaje bien puede ser un homenaje

a tantos carnavaleros de pro que han

escrito, escriben y escribirán páginas

inolvidables de una de las celebraciones

con más arraigo de La Solana.

Ré y Domingo Alhambra como Tip y Coll en 1978.

Paquillo con un grupo de amigos en el cine de Onsurbe.

Paquillo en la borrica de Martín.