GACETA DE LA SOLANA 312

Gaceta de La Solana 40 Ha sido Noticia 175 años de las apariciones de la Virgen del Consuelo Consoladora de los afligidos En La Solana, la advocación de la Virgen del Consuelo adquirió una dimensión profundamente entrañable y milagrosa a partir de un hecho que marcó la religiosidad popular del siglo XIX: la aparición de la Virgen a una joven llamada María Antonia Gar- cía-Parra Naranjo un 25 de mayo del año 1850. María Antonia solía acudir a la iglesia de Santa Catalina para rezar y fue allí, en la capilla de San Ildefonso, donde se produjo la aparición de la figura de la Virgen María. Le pidió que la llamara ´Madre del Consuelo´, porque a ella acudían los afligidos y necesitados. Este hecho dio origen a una gran devoción local y fuera del pueblo. La Virgen del Consuelo se convirtió en símbolo de cercanía y protección, especialmente para los más humildes, además de consuelo en tiempos de inquietud. Cuando una comunidad atribuye a una imagen mariana esta ad- vocación ´del Consuelo´, está reconociendo en María una figura materna capaz de acompañar los momentos más sombríos de la existencia. Es el rostro de la ternura, cuya sola contemplación parece suavizar las heridas del corazón. Es un ejemplo conmo- vedor de cómo la fe popular, lejos de ser una simple tradición, puede convertirse en un verdadero refugio espiritual en tiempos de necesidad. En definitiva, la Virgen del Consuelo no solo ha sido venerada, sino que ha modelado una forma de ser y de sen- tir en La Solana. En tiempos de pérdida, soledad o incertidumbre, la Virgen del Consuelo ofrece la capacidad de permanecer. Esa es, quizá, su mayor forma de consuelo. Inmaculada Serrano P aulino S ánchez L a conmemoración del 175º aniversario de la aparición de la Virgen del Consuelo a la solanera María Antonia García Parra Naranjo concluyó el domingo 25 de mayo, la misma fecha de la primera de las tres apariciones en la capi- lla de San Ildefonso. Así finalizó la novena en honor de la Vir- gen, celebrada en la parroquia de Santa Catalina. El párroco, Benjamín Rey, recordó en la última homilía diversos aspectos relacionados con la aparición, así como la descripción que hizo el sacerdote Eusebio María Morales sobre la forma que debían tener las imágenes de la Virgen del Consuelo y del Niño Jesús. Leyó un poema escrito por la vidente, que falleció con 40 años tras profesar como monja de clausura en el convento de Concepcionistas Franciscanas de Manzanares. Tanto el sábado como el domingo se repartieron a los fieles dos estampas de la Virgen, una con un primer plano de las imágenes, y otra de la aparición, costeada por la familia Arroyo López de la Osa. Las celebraciones continuarán en noviembre. Inmaculada Serrano ofreció una aproximación sobre las apariciones y la figura de la vidente. “Se trataba de dar voz a esta historia que mucha gente ha olvidado, o simplemente no conoce”. Lleno para escuchar la charla sobre las apariciones