GACETA DE LA SOLANA 300 MAYO-JUNIO 2023

Gaceta de La Solana 114 Caminar y Contar U na alabanza, muchas, merecen las plazas mayores por tanto como nos ofrecen, por las veces que las cruzamos, mencionamos, por ser testigos eternos de juegos, paseos, encuentros, charlas… La vida alrededor de una plaza, la de cosas que han acae- cido en ellas, las gentes que conocimos, los momentos vividos… Ya de chicos, solíamos oír una frase en casa, o por la calle, muy corta: “Voy a la plaza”; si era por la mañana se adivinaba rápido dón- de se podía ir a esas horas y con un ces- to, una fiesta casi, ir a la plaza, ya saben, era ir a hacer la compra diaria, o para varios días. Al ir a la escuela ya había en el ambiente un rico olorcillo por los alrededores de esos que no se olvidan, una más de nuestra niñez, tan llena de cosas sencillas y hermosas. Y cuando podíamos la muchachada, en sábado o vacaciones, nos apuntábamos entusias- mados a acompañar a nuestros padres, y hasta nos enristraban otro cesto y nos cargaban con un melón, o dos, pensan- do siempre que nos darían un premio en forma de un par de tallos, o un hela- do en los calientes veranos. Era la plaza un espectáculo. Se pone uno a recordar y es que “vemos” aquel escenario, aun- que lloviera y bien, cómo estaban colo- cados los puestos y cómo eran quienes nos atendían. Y el sabor típico de las ta- bernas, y el trasiego de la animada posa- da, y el hombre que vendía “tortasoles”, pues ya se acercaba la fiesta de la Virgen de Peñarroya. Hombres y mujeres tan- tos años allí trabajando en las plazas de pueblos nuestros y de otros muchos que nos han hablado. Como después en los mercados municipales, con las mismas personas, además, más las nuevas gene- raciones siguiendo la tradición. Había otra frase, muy solanera, que se decía mucho, y quizás siga, que era “voy a ha- tear”, o a hacer el hateo, que seguro vie- ne de hato, claro, hacer un hato. Y otra más, muy oída antaño, “voy al cuarto”, muy familiar, pues era —y que sea— ir a una frutería, a una carnicería o pesca- dería, algo entrañable, claro. Un cuarto de… estar a gusto, sin prisas… En la villa de Torrelaguna, cerca de Alcalá, un grupo de veteranos nos in- dicó un mesón por si queríamos comer, al tiempo que nos hablaban de lo bien que los trató Paco Martínez Soria ro- dando “El turismo es un gran invento”, y que “echaron” unos cigarros con él en su coqueta plaza. Nos hubiera gustado ver la escena. Otro, recordaba los días de toros y los carros, hasta una película con Francisco Rabal toreando… bue- no, un torero “igual que él”, apuntó uno más que se unió a la tertulia, y soltó una “bomba”: Vieron a Sofía Loren muy de cerca, le gustaba mucho el pan y los ri- cos productos de la tierra, como a Frank Sinatra y a Cary Grant que rodaron es- cenas de “Orgullo y pasión” en los años 50. Luego se quedaron “mudos” cuando otros paisanos la descubrieron bañán- dose en el Jarama… En la Plaza de Cervantes de Alcalá nos hemos encontrado muchos días con gentes de La Solana, matrimonios que llegaron en los años 60 y 70 dejando atrás pueblo, casas, familias… pero con la esperanza siempre de volver, claro, esa palabra tan hermosa. Vuelta a las raíces. Recordamos a una señora, Ara- celi, buenísima, que se enteró de nues- tra “mili” allí y muchas tardes aparecía en el CIR (Centro de Instrucción de Reclutas) con su bolsa de fruta y dulces y les decía a los guardias de la puerta: “Buenas tardes, ya me iréis conocien- do, porque vengo a ver a Luis, mi pai- sano, somos de La Solana”. Nos emo- cionaba la mujer cuando la veíamos llegar. “¡Ay, Luisito, qué alegría de ver- te!”. Y a nosotros, claro. Al volver, sin esperarlo, de nuevo a Alcalá, fuimos a visitarla, a devolverle la alegría… Le dijimos que estábamos en una pensión en la plaza. No habría espacio ahora para contarles momentos, invitacio- nes a su casa, su esposo, Juan Julián, sus hijos Regina y José, todo su cariño, igualmente. ¡Y cuántas veces nos espe- raban ahí, sentados en un banco! Y, a menudo, con más paisanos. Luis Miguel García De Mora En la plaza Plaza Mayor de La Solana en los años 80 del siglo pasado.