GACETA DE LA SOLANA NÚMERO 297

Gaceta de La Solana 48 Entrevista G abriel J aime F rancisco López del Castillo Rode- ro (La Solana, 1991) es un chico inquieto, que no rehúye una son- risa, y amigo de escuchar. Así se com- portó cuando estuvo con GACETA. Su pasión es escribir y seguir escribiendo. Atrás quedó su trabajo como conta- ble (es Graduado en Administración y Dirección de Empresas). Su audacia le hizo lanzarse al ruedo de la pluma con Perdona, ¿tienes fuego? (2017), su pri- mera novela. El éxito le animó a seguir y llegó Lo que escribí antes y después de ti (2018); la última ha sido Mi vida da para una serie (2020). Ha sido premia- do en Roquetas de Mar (Almería) por la editorial ‘Círculo Rojo’ como el primer autor que alcanza 25.000 ejemplares vendidos, sin librerías ni intermedia- rios de por medio. Un caso único. Se le ve feliz. Nos dice que este premio es un grito al mundo: “Si tienes fe en ti mismo y trabajas duro, se puede”. Vamos a co- nocerle un poco mejor. ¿Cómo definirías la profesión de escritor? Es complicado, ya que en teoría soy escritor, pero también soy empresa- rio. Como escritor, lo que más feliz me hace es poder vivir de desahogar- me escribiendo. Es un sueño, un lujo, un privilegio… Me parece la profe- sión más bonita del mundo. Y luego, encima, si le sumas el cariño que me brindan los lectores, lo convierte en el mejor trabajo del mundo. Pero habrá algo que no te guste de tu nuevo oficio… La responsabilidad que siempre pesa so- bre mis espaldas. Cuando tienes un ne- gocio, tienes que cumplir con tus clientes y darles el mejor servicio. No puedo des- aparecer dos semanas, por ejemplo. De no haber sido escritor… ¿Qué te hubiera gustado ser? Por soñar, futbolista. Tiene que ser es- pectacular y por eso admiro a futbolistas profesionales como Iván Romero o Fran Manzanara. Pero vaya, es muy complica- do, y yo nunca he sido buen jugador. ¿Cuál ha sido tu mayor logro? Soy de los que piensan que los logros son relativos. En mi caso, creo que es haber conseguido que mi familia esté orgullosa de mí. He conseguido cosas importantes, como vivir de escribir o el premio que me concedió mi editorial, pero ver el orgullo en los ojos de mis pa- dres me hace sentir unas mariposas en el corazón que no soy capaz de describir. ¿Y cuál ha sido tu mayor decepción? Por suerte, ninguna. Digamos que soy de los que se quedan con la lección, y no con el fracaso. He hecho muchas cosas mal en mi vida, como todos, pero me han llevado a lo que soy hoy. ¿Tienes algún ritual o alguna manía antes de escribir? Hay mucho mito sobre este tema, en es- pecial con el del típico escritor al que le “La vida es para disfrutarla, sin esperar a más adelante” Fran López lee su libro Perdona, ¿tienes fuego? en la Plaza Mayor.

RkJQdWJsaXNoZXIy NTEwODM=