GACETA DE LA SOLANA NÚMERO 297

Gaceta de La Solana 3 Editorial Edita: Ilustre Ayuntamiento de La Solana Director: Aurelio Maroto Redactor-Jefe: Gabriel Jaime Redacción: Paco del Olmo Distribución gratuita: 7.700 ejemplares Redacción y Administración c/ Sagrario, 1. 13240 La Solana 926 631 517 / 926 633 038. www.lasolana.es [email protected] Colaboraciones: Paulino Sánchez, Luis Miguel García de Mora, Jesús Romero de Ávila, Ángel Torres y Lucía Delgado García de Dionisio. Diseño de portada: Owen David Muñoz Riquelme. Realización Cierre de ese número: Domingo, 18 de diciembre de 2022. Depósito Legal: CR 1226/1990 Visita la web de tu Ayuntamiento SUMARIO UN POCO DE OPTIMISMO, POR FAVOR “ Los jóvenes de hoy no pare- cen tener respeto alguno por el pasado ni esperanza nin- guna en el porvenir”. Esta frase la compra mucha gente hoy en día, segura de que retrata la realidad, pero resulta que se atribuye a un tal Hipócrates, el llamado ‘padre de la medicina’, que vivió en el si- glo V antes de Cristo. Si damos por bueno el axioma, es eviden- te que los males del mundo han cambiado en la forma, no en el fondo. Ni los jóvenes de ahora son peores que los de antes, ni el porvenir está decidido. Viene esta reflexión a cuenta en vísperas de Año Nuevo, pocos meses después de que una ola de pesimismo nos barriera con un vaticinio de cataclismo económi- co tras el verano. Ya sabemos que un pesimista es aquel que mira hacia ambos lados antes de cru- zar una calle de un solo sentido, y fueron legión los que adornaron grandes titulares con mensajes catastrofistas. Las malas noticias venden más que las buenas, es un hecho. Sin embargo, pasó el ve- rano y la rueda del mundo siguió girando, con sus problemas y sus miedos, sí, pero sin ningún Ar- magedón. Cabe pensar hasta qué punto son interesados determinados pronósticos, por qué tantos gu- rús de la economía y de la polí- tica juegan al oráculo más pesi- mista posible y qué hay detrás de tanto aviso apocalíptico. Al me- nos en España, la realidad es que las calles siguen llenas de gente, no hay mesa en los restaurantes y las colas para pagar en Primark son las mismas de siempre. Dón- de quedan aquellos presagios de lineales semivacíos o de ciudades fantasmas, víctimas de un segun- do gran confinamiento. No se trata de amplificar un optimismo vano, qué va. Sabe- mos que abundan las familias con el bolsillo hueco, gente que no encuentra una nómina a la que agarrarse y precios que han eclosionado de forma grotesca. Hacer sátira de la estrechez, nun- ca. Pero tampoco elevarla como un tótem en espíritu. Decimos ‘sí’ a la prudencia; decimos ‘no’ a los cenizos de turno. Ahora termina 2022, y lo hace con un pan bajo el brazo: la an- siada lluvia. Ojalá sea un presa- gio de que 2023 será mejor en todos los sentidos. Desgraciada- mente –o agraciadamente- no lo sabemos, por mucho que algunos se empeñen en garantizar que esto será así o de aquella mane- ra, como un mantra que no cesa. Creemos que nada está escrito de antemano; es el ser humano quien escribe la historia futura. Alimentados de pesimismo no vivimos la vida, la sufrimos (Mi- guel Delibes). 4 SALUDA DEL ALCALDE 6-24 HA SIDO NOTICIA 25 EDUCACIÓN 26-27 POLÍTICA 28-32 FESTIVAL DE CINE Y VINO 34-46 CULTURA 48-49 ENTREVISTA 50 ECONOMÍA 52-53 AGRICULTURA 54-66 LA GACETA DEPORTIVA 68-70 COLABORACIONES 72-75 NUESTRA HISTORIA 76 TRADICIONES 78-83 CONTRASTE URBANO 84-85 CAMINAR Y CONTAR 86-90 FOTOS DE ANTAÑO 92 CARTAS AL DIRECTOR Y ENTIERROS