GACETA DE LA SOLANA Nº273 BAJA

Gaceta de La Solana 62 Colaboraciones E n el principio… la mujer, aparte de la casa, laboraba en diversas temporadas campesinas. La mujer manchega venimos a referirnos, claro está. Y allá que iba, valerosa, a la vendimia o a la recolección de aceituna; en otros casos surgió en pueblos y ciudades una actividad entre artesana e industrial como es la confección de ropas: camisas, pantalones, chaquetas, batas, gorras… y eso imprimió un cambio a la situación de la mujer como parte activa de la sociedad rural. Bien sabido es cómo y cuánto se ha cosido en tiempos pasados, ora en la casa, ora en los talleres o fábricas, y he- mos estado con Juana Moreno, natural de La Solana y una de aquellas que tenían que coser. Pura vocación. • De modistilla a importante diseñadora, Juana… • “Gracias. Vamos trabajando gracias a Dios. Yo era de las que tenía una frase en la cabeza: ‘estaré en casa con mi madre’. Ya de peque- ña me ponía a coser algo, aunque lo que me gustaba era la arqueología y las antigüeda- des. Leía mucho y soñaba con hacer cosas, y a los 18 años fui a casa de una modista a que me enseñara bien el oficio”. Y tanto que aprendió la señorita porque en un par de años se marchó a Madrid a estudiar Di- seño. En sus ratos de ocio recorría bonitas tien- das como ‘La revoltosa’ o ‘Pontejos’. Los años 80 eran suyos y tenía que aprovecharlos. Miró las páginas amarillas y encontró oro. Al poco tiempo estaba en la Escuela Superior de Técni- cas de la Confección, en plena Gran Vía. • ¿A qué tipo de público se dirige tu costura? • Suelo trabajar desde encargos personales. Cada cliente me dice algo sobre sus gustos o preferencias. Mis colecciones van dirigidas a mujeres de 25 a 45 años. Desde luego, es un privilegio trabajar en lo que te gusta. • ¿Qué recuerdas de tu niñez en nuestro pueblo? • Todo. La casa, el patio, y todos allí, claro. Y la lumbre en invierno. Y las meriendas con pan y nocilla. De Madrid se trasladó a Alicante, donde triun- fa. Ha hecho ropa hasta para los desfiles de moros y cristianos. Ha participado en galas de moda alicantina varios años, vistiendo a Vane- sa Romero, que fue Miss Alicante. Recuerda la experiencia inolvidable de trabajar con el cono- cido diseñador Hannibal Laguna, así como las charlas y encuentros con el malogrado Manuel Piña. También ha presentado colecciones de sus vestidos en su pueblo natal y para el certa- men de Miss La Solana, amén de otros trabajos expuesto en la Casa de Comercio de Madrid. Juana Moreno ha diseñado para mujeres tan mediáticas como Nuria Roca, Norma Duval, Ana Obregón o Mónica Naranjo. Así esta mujer manchega, solanera, aquella que calladamente trabajó sin parar en su pueblo, en el campo, en su casa… Y hasta dónde ha podido llegar. Juana Moreno, brillante diseñadora de La Solana Por Luis Miguel García de Mora Logo comercial de la diseñadora solanera La solanera Juana Moreno durante una exhibición